Tal vez sea uno de los instrumentos más antiguos para cocinar y comer, a excepción del cuchillo. La cuchara nace junto al fuego y la cocción. Hablar de, comer de cuchara es sinónimo de comer rico, sabroso y contundente.

Las primeras cucharas eran de corteza de madera, y junto al mar de conchas de moluscos. Poco a poco se perfeccionó, se tallaron maderas, se añadió un mango que evitase quemarse las manos. Posteriormente la cuchara se hizo más grande y así nació el cucharón, hermano mayor de la cuchara para cocinar y servir a cada comensal. Hoy día existen numerosos tipos de cucharas o utensilios similares.

El término cuchara proviene del latín "cochleare". En la antigua Roma hubo dos tipos de cuchara, la mayor, ligula y la menor llamada cochlea. Esta última tenía un mango en forma de aguja que servía también para pinchar trozos de comida o abrir mejillones. Su nombre hacía referencia a la concha, la coclea, con mango.

En las primeras civilizaciones, tanto Egipto como Mesopotamia, se fabricaban cucharas con mangos tallados y otros adornos de fantasía, logrando una gran variedad de modelos y formas. Hay que hacer una especial referencia al museo del Louvre de París, donde se encuentran algunas de las mejores piezas de todos los tiempos.

En el siglo XIX, con la industrialización, se crearon muchos tipos de cucharas con diferentes aleaciones. Dentro de la cocina se sigue usando la cuchara de madera, pues no confiere ningún sabor a los alimentos, ya que hay cucharas de plata o cobre que en contacto con diversos ácidos se descomponen y pueden dejar mal sabor o también ligeros restos de metal que pueden dañar la salud. Además, las cucharas de madera son bastante aislantes del calor con lo que se manejan mejor al no quemarse la mano. El plástico se ha difundido y ha entrado en la cocina con cucharas, cucharones o cazos de servir, pero como la madera no hay nada.

Sopas, caldos, guisos, cocidos, potajes, purés, pastas, cremas, postres y hasta ensaladas son compañeros de la cuchara. No se pueden concebir estos platos sin la cuchara. Nació junto a ellos y con estos platos se perfeccionó. Símbolo de buen comer, de comida casera, caliente, con sabor a hogar. La cuchara tiene su etiqueta en la mesa, la forma de sostenerla, su preciso contenido para la boca y sus tamaños se adecuan a la ingesta que se hace, no es lo mismo utilizarla en una sopa o postre, o en una infusión o un café.

A continuación recomendamos varias recetas dignas de la mejor cuchara, como la harira, el arroz murciano, el cocido madrileño, la crema de mariscos o el tiramisu.